La iluminación en la sede regional de una de las bancas francesas más destacadas

El edificio de la sede regional de Atlantique Vendé, uno de los institutos franceses de crédito más  destacados, es un ejemplo perfecto de arquitectura bioclimática diseñado por la sociedad AIA  Ingénierie.  Las oficinas modulares, desarrolladas sobre tres niveles, rodean el patio con plataformas laterales  organizadas en cinco plantas. La entrada se enriquece con una cristalera de 15 m que durante el día  deja pasar la luz natural y un ascensor panorámico que da acceso a las distintas plantas.  En este contexto, el estudio de arquitectura AIA decidió dejar espacio a la luz natural controlando, al  mismo tiempo, la iluminación artificial. A partir de este principio, se desarrolló el concepto de  iluminación dinámica del vestíbulo y del patio donde se utilizaron luminarias Zyl de iGuzzini.  Para evitar que el edificio desaparezca de noche y al apagarse la iluminación artificial, los arquitectos  crearon una animación luminosa central que se inserta perfectamente en la verticalidad del gran  vestíbulo: el diseñador de iluminación Philippe Laheux, del estudio AIA, decidió iluminar el gran atrio  central con suspensiones de cristal.  Según el diseñador de iluminación, el led es una elección obligatoria porque esta tecnología ayuda a  reducir el consumo y al mismo tiempo permite utilizar un sistema de gestión capaz de crear una  iluminación dinámica y de controlar de manera automática las variaciones de intensidad y color. 

Philippe Laheux optó por la luminaria Zyl de iGuzzini, disponible en versión de suspensión y de  recorrido. Zyl está compuesta por una base de acero inoxidable y un apantallamiento exterior de  policarbonato transparente que protege un cilindro decorativo de material termoplástico transparente.  El código de producción industrial estándar fue modificado para adaptarlo perfectamente a las  especificaciones del proyecto. El led blanco fue sustituido por tres ledes RGB, se cambiaron las  alturas de la base de las luminarias de recorrido y se diseñaron nuevos cables de suspensión para  impedir que las luminarias más bajas se encontraran a más de 6 m del nivel superior de la cristalera.  Los colores azul y verde de los leds son los colores de la sede regional de Atlantique Vendée. Dentro,  la intensidad luminosa de las luminarias de suspensión varía en función de la luz natural y el color  sigue el ritmo de las Zyl de exteriores.  El diseñador de iluminación registró varias secuencias luminosas para que los técnicos del edificio  pudieran elegir la programación más adecuada durante las manifestaciones particulares. Las  variaciones cromáticas siguen un ritmo lento y utilizan tonalidades tenues: la idea es acompañar a los  empleados al entrar y al salir sin crear un espectáculo de luz.  El sistema DALI que controla todas las luminarias está conectado al sistema de gestión del edificio y  activa el escenario de luz deseado. El cliente deseaba que la iluminación dinámica se apagara en  automático en función de la presencia de público en los locales. En el vestíbulo se aplicaron un total  de 65 luminarias Zyl de suspensión y en el patio, 135 luminarias Zyl de recorrido.